Convergencia

La convergencia en criptografía se refiere a la tendencia en la que los mercados e instituciones financieras tradicionales se integran con el floreciente ecosistema de criptomonedas, desdibujando las líneas entre las finanzas convencionales y las finanzas descentralizadas (DeFi). Este proceso implica la adopción de tecnología blockchain, activos digitales y servicios financieros relacionados por parte de actores principales como bancos, administradores de activos y procesadores de pagos.

Ejemplos de convergencia incluyen:

  1. Instituciones financieras tradicionales que ofrecen servicios criptográficos: Los principales bancos y empresas de inversión comienzan a ofrecer productos de custodia, comercio e inversión relacionados con las criptomonedas. Por ejemplo, Goldman Sachs ofrece operaciones de futuros de Bitcoin o JP Morgan lanza su propia moneda estable.
  2. Integración de blockchain en las operaciones principales: Empresas de todos los sectores integran la tecnología blockchain para la gestión de la cadena de suministro, la verificación de identidad y el mantenimiento de registros transparente. Por ejemplo, la plataforma Food Trust de IBM rastrea el recorrido de los productos alimenticios utilizando blockchain, garantizando transparencia y autenticidad.
  3. Protocolos DeFi que tienden un puente con las finanzas tradicionales: los protocolos financieros descentralizados comienzan a ofrecer servicios que imitan los productos financieros tradicionales como préstamos, empréstitos y comercio de derivados. Proyectos como Compound y Aave permiten a los usuarios prestar o tomar prestadas criptomonedas sin intermediarios.
  4. Marcos regulatorios que se adaptan a las criptomonedas: Los gobiernos y los organismos reguladores desarrollan marcos para regular las criptomonedas y los activos digitales, brindando claridad y legitimidad a la industria. Por ejemplo, la SEC proporciona orientación sobre la clasificación de activos digitales o el GAFI emite directrices para regular los intercambios de cifrado.

La convergencia en criptografía representa un cambio significativo en el panorama financiero, donde las finanzas tradicionales y digitales se cruzan, lo que genera nuevas oportunidades, desafíos y consideraciones regulatorias.